El Ikebana se basa en la armonía de una simple construcción lineal y la inclusión de flores o elementos que nos puede ofrecer la propia naturaleza. A lo largo de los siglos, han habido multitud de escuelas de Ikebana, todas ellas con sus características y sus manías. La primera escuela fue la de Ono no Imoko, conocida como Ikebono, creada a principios del s. VII. Su creador fue un japonés que tuvo la oportunidad de ir tres veces a la corte de la China Imperial. Cuando se retiró, se convirtió en el guardián del monasterio budista Rokkaku-do, situado a las afueras de Kyoto y allí se convirtió en abad. Pasó a llamarse Semmu y se hospedó en una pequeña casa llamada ike-bo-no (casa del lago). De ahí vino el nombre de la escuela. De sus viajes a China aprendió el arte de las ofrendas florales, cosa que aprovechó para perfeccionar en su retiro y establecer unas primeras normas. Pero a partir de él, surgieron cantidad de escuelas que tienen su propias características, simbologías y demás detalles. Los materiales que se usan para la construcción son flores, hojas, cereales, hierbas, ramas, semillas, frutas, vegetales etc...Dichos materiales podían ser vivos, secos o artificiales. En un principio se prefería el uso de materiales del lugar, aunque dicha condición con el tiempo se fue perdiendo (propiciada en cierto modo por la apertura al mundo que protagonizó Japón a finales del s. XIX). Otro aspecto importante dentro del ikebana es el diseño. Las partes más importantes del diseño son el color, la forma, la textura y la línea. El color y la forma vienen dadas por la propia naturaleza del elemento escogido, aunque con la creación de las escuelas modernas, dicha naturaleza podía modificarse. La textura venía determinada por la superficie de los materiales usados y la línea era expresada por la ramas que tenía dicha composición. Todos estos detalles eran imprescindible para hacer una buena obra de ikebana.La primera escuela fue la de Ono no Imoko, conocida como Ikebono, creada a principios del s. VII. Su creador fue un japonés que tuvo la oportunidad de ir tres veces a la corte de la China Imperial. Cuando se retiró, se convirtió en el guardián del monasterio budista Rokkaku-do, situado a las afueras de Kyoto y allí se convirtió en abad. Pasó a llamarse Semmu y se hospedó en una pequeña casa llamada ike-bo-no (casa del lago). De ahí vino el nombre de la escuela. De sus viajes a China aprendió el arte de las ofrendas florales, cosa que aprovechó para perfeccionar en su retiro y establecer unas primeras normas. Pero a partir de él, surgieron cantidad de escuelas que tienen su propias características, simbologías y demás detalles. Los materiales que se usan para la construcción son flores, hojas, cereales, hierbas, ramas, semillas, frutas, vegetales etc...Dichos materiales podían ser vivos, secos o artificiales. En un principio se prefería el uso de materiales del lugar, aunque dicha condición con el tiempo se fue perdiendo (propiciada en cierto modo por la apertura al mundo que protagonizó Japón a finales del s. XIX).
jueves, 21 de mayo de 2009
jueves, 14 de mayo de 2009
jueves, 7 de mayo de 2009
Al borde del Acantilado
Hoy estuve con mi amada
Al recogerla en el coche me obligó a salir de la ciudad y tomar una ruta desconocida para mí, que nos condujo hasta la cima de un acantilado que se alza perpendicular a una cala accesible solamente por vía marítima.
Escondida en el cuarto oscuro de mi entendimiento anida la duda de si me llevó a ese lugar (santuario apaciguador de sus ansiedades, me dijo) huyendo de la monótona rutina cotidiana o buscando, una vez más, la confirmación fehaciente de mi amor imperecedero.
Muy por debajo de nuestros píes, el mar desbocado se rompía contra los peñascos, que a su vez también se erosionaban en su oposición a las aguas .Quise decir algo romántico, en la creencia de que la ocasión así lo requería, pero ella me lo impidió con un gesto mudo, aunque impositivo. Me callé, con el único fin de satisfacer su deseo, y me limité a observarla. Una ligera irritación me incomodó al comprobar como me ignoraba a favor de las olas encrespadas. Pero ella no estaba ensimismada en el espectáculo acuático. En realidad no estaba. Sus ojos se habían hundido en las negras profundidades, mientras su alma vagaba por la superficie, atravesando veloz la niebla que la rozaba, en busca de Dios sabe que lejanos e ignotos paisajes. Me coloque a su espalda y mis brazos circundaron su pecho, en tanto la besaba calidamente en la nuca. Más no se estremeció como siempre que esto hago. Ni siquiera se enteró porque entonces era el mar, solo el mar, quien la poseía
Transcurrió un tiempo interminable y ella seguía ausente. Se ve que su eventual amante era contumaz en el oficio, que sabía bien como retenerla a su merced. La niebla subía hasta nosotros, traspasando las ropas inadecuadas que llevábamos, humedeciéndonos los huesos. Sin embargo yo,la recibí incluso agradecido, podría decir, pues comprendí que era mi aliada, la única que podría derrotar a su carcelero.
Un escalofrió recorrió su cuerpo. Obedeciendo a un impulso de galantería, me despoje de la liviana chaqueta para proporcionarle un precario abrigo, que ella agradeció apoyando con languidez su cabeza en mi hombro. Ya no me cupo duda. En breve querría volver a nuestro refugio y allí, apasionadamente arrebujados junto a la crepitante chimenea, podría recuperarla.
La intrépida zambullida de un cormorán en busca de alimento distrajo su mirada, que se hizo retractil para ascender lentamente desde el fondo abismal donde se había perdido. No obstante antes de alojarse definitivamente en sus pupilas se posó unos instantes en las crestas del oleaje, como jugando a galopar sobre sus grupas espumosas . Al fin acabó refugiándose en su guarida, devolviéndole esa alegre luminosidad que hace de mí un siervo de nula voluntad.
Aterida de frío, tornó a la realidad. Se giró para arroparse entre mis brazos, como una gata mimosa que se restriega contra los tobillos del amo incitándole a la caricia. En acción coincidente entornó los parpados, se alzo de puntillas para poner su rostro a la altura del mío y me ofreció la boca en generosa recompensa a mi comprensivo silencio. Aderezados con la caliente humedad de la salitre marina, sus labios eran un fecundo manantial de sensuales promesas y pensé que así deberían besar las sirenas, si es que sirenas eran las diosas de los océanos.
PH. ÁCIDO
Al recogerla en el coche me obligó a salir de la ciudad y tomar una ruta desconocida para mí, que nos condujo hasta la cima de un acantilado que se alza perpendicular a una cala accesible solamente por vía marítima.
Escondida en el cuarto oscuro de mi entendimiento anida la duda de si me llevó a ese lugar (santuario apaciguador de sus ansiedades, me dijo) huyendo de la monótona rutina cotidiana o buscando, una vez más, la confirmación fehaciente de mi amor imperecedero.
Muy por debajo de nuestros píes, el mar desbocado se rompía contra los peñascos, que a su vez también se erosionaban en su oposición a las aguas .Quise decir algo romántico, en la creencia de que la ocasión así lo requería, pero ella me lo impidió con un gesto mudo, aunque impositivo. Me callé, con el único fin de satisfacer su deseo, y me limité a observarla. Una ligera irritación me incomodó al comprobar como me ignoraba a favor de las olas encrespadas. Pero ella no estaba ensimismada en el espectáculo acuático. En realidad no estaba. Sus ojos se habían hundido en las negras profundidades, mientras su alma vagaba por la superficie, atravesando veloz la niebla que la rozaba, en busca de Dios sabe que lejanos e ignotos paisajes. Me coloque a su espalda y mis brazos circundaron su pecho, en tanto la besaba calidamente en la nuca. Más no se estremeció como siempre que esto hago. Ni siquiera se enteró porque entonces era el mar, solo el mar, quien la poseía
Transcurrió un tiempo interminable y ella seguía ausente. Se ve que su eventual amante era contumaz en el oficio, que sabía bien como retenerla a su merced. La niebla subía hasta nosotros, traspasando las ropas inadecuadas que llevábamos, humedeciéndonos los huesos. Sin embargo yo,la recibí incluso agradecido, podría decir, pues comprendí que era mi aliada, la única que podría derrotar a su carcelero.
Un escalofrió recorrió su cuerpo. Obedeciendo a un impulso de galantería, me despoje de la liviana chaqueta para proporcionarle un precario abrigo, que ella agradeció apoyando con languidez su cabeza en mi hombro. Ya no me cupo duda. En breve querría volver a nuestro refugio y allí, apasionadamente arrebujados junto a la crepitante chimenea, podría recuperarla.
La intrépida zambullida de un cormorán en busca de alimento distrajo su mirada, que se hizo retractil para ascender lentamente desde el fondo abismal donde se había perdido. No obstante antes de alojarse definitivamente en sus pupilas se posó unos instantes en las crestas del oleaje, como jugando a galopar sobre sus grupas espumosas . Al fin acabó refugiándose en su guarida, devolviéndole esa alegre luminosidad que hace de mí un siervo de nula voluntad.
Aterida de frío, tornó a la realidad. Se giró para arroparse entre mis brazos, como una gata mimosa que se restriega contra los tobillos del amo incitándole a la caricia. En acción coincidente entornó los parpados, se alzo de puntillas para poner su rostro a la altura del mío y me ofreció la boca en generosa recompensa a mi comprensivo silencio. Aderezados con la caliente humedad de la salitre marina, sus labios eran un fecundo manantial de sensuales promesas y pensé que así deberían besar las sirenas, si es que sirenas eran las diosas de los océanos.
PH. ÁCIDO
O Entroido
A Momo, fillo da noite , irman da Discordia, deus da burla, da critica e do sarcasmo, fanselle todolos anos en Galicia as festas do Etroido. Con palabras Entroido ou Antroido denominanse en Galicia as festas do Carnaval.
O Carnaval é unha festa de transito entre o sono-morte de invierno e o renasemento-resurrección da primavera, constituiendo un culto á terra, á fertilidade e á actividade sexual, época onde aumenta o nivel animico para a celebración festiva.
O Entroido é unha festa licenciosa nas suas orixe, existen multitude de lendas que ha relacionan directamente con fecundidade e o desenfreno sexual.
Non existe unanimidade en canto a orixe, as teorias refirense as Saturnais, Carrus –Navalis, Diomisiais , Rurais, e Imperiais romanas.
Nas Dionisiais Rurais, celebrabanse representacións de farsas en honra a Dionisios, nas que participaban os campesiños, alcanzando as mulleres un elevado grao de excitación sexual coa danza. O Carros-Navalis, eran bacanais, nas que se rendia culto a Baco. Os Saturnais foron festas na honra do deus Saturno, nélas permitiase que os esclavos foran servidos polos seus amos e utilizaran as suas ricas vestiduras.
No mundo xermánico tamén se construia un barco con rodas que se facia descender polos rios. Este descubrimento orixinou outras teorias dobre a orixen do carnaval, e situouse nos celtas, xa que era unha cultura moi rica anterior a romanización.
Finalmente diriamos que o carnaval é unha festa celta que penetrou a través do mundo romano no cristianismo e os deuses e cerimonias celtas dariannos a verdadeira explicación do fenómeno.
Comprobouse que os trazos fundamentais do carnaval aparecen en grande multitude de culturas e non necesariamente por influencia europea.
O Carnaval é un conxunto de ceremonias o simbolismos das cales se conxugará para obter o seu fin primordial asegurase a continuidade da vida nunha época cósmica perigosa . O carnaval era temido tanto dende o punto de vista moral como politico.
As festas de carnaval suprimironse por decreto en 1939, debido ó cariz que foran tomando os carnavais no século XIX.
A teoria que defende a orixe do Entroido nas Lupercais, baséase en que durante o mes de febreiro os sacerdotes Lupercos de Roma perseguian as súas mulleres e tamen aos homes baténdolle con peles e membros de animais, rito que se revive na localidade de Xinzo de Limia (Ourense)
Ainda que non se pode determinar con certeza a orixe do Entroido, sabemos que no Renacemento tuvo moita resonancia , pero xa antes no seculo XIII. Alfonso X “O Sabio” alude as celebracions de escarnio nas Igrexas.
Do Entroido fannos referencias San Gregorio, o Pai Mariano” Arcipreste de Hita”, Juan de la Encina, Lebrija, Alvaro de Luna, Frai Bartomé de las Casas, e sábese que o Papa Julio II protexeu de xeito especial estas festas.
Sobre as datas nas que se celebra o Entroido en España podemos afirmar que, ao ser unha festa lunar, non existen datas fixas para a súa celebración
En Galicia será dúas semanas e media septuaxesima , sesaxesima, domingo, luns e martes de Entroido. En Xinzo de Limia (Ourense) dura case un mes e denominaxe: Entroido, Antroido, Introito.
Nas escolas a celebración, convértese nun mundo diferente. A rapazada fai xogos no patio e rememora as costumes tradicionais do Entroido; nas que os cativos cheos de Leticia esquecen os problemas e o traballo cotiá.
Tamen elaboran disfraces e desfilan as comparsas. Ë pois o momento de cambiar de personalidade, facerse distintos, acompañarse das bromas e fantasias, facer cousas que non serian capaces de facer con cara descuberta.
Os barullos, as mascaras e algaradas enchen este acontecemento para dar testemuña da creatividade lúdica dos nenos, da súa comunicación afectiva, convertendose en actores para exteriorizar os elementos internos da súa individualidade.
Xavier Barros Castro
Campolongo 2008
O Carnaval é unha festa de transito entre o sono-morte de invierno e o renasemento-resurrección da primavera, constituiendo un culto á terra, á fertilidade e á actividade sexual, época onde aumenta o nivel animico para a celebración festiva.
O Entroido é unha festa licenciosa nas suas orixe, existen multitude de lendas que ha relacionan directamente con fecundidade e o desenfreno sexual.
Non existe unanimidade en canto a orixe, as teorias refirense as Saturnais, Carrus –Navalis, Diomisiais , Rurais, e Imperiais romanas.
Nas Dionisiais Rurais, celebrabanse representacións de farsas en honra a Dionisios, nas que participaban os campesiños, alcanzando as mulleres un elevado grao de excitación sexual coa danza. O Carros-Navalis, eran bacanais, nas que se rendia culto a Baco. Os Saturnais foron festas na honra do deus Saturno, nélas permitiase que os esclavos foran servidos polos seus amos e utilizaran as suas ricas vestiduras.
No mundo xermánico tamén se construia un barco con rodas que se facia descender polos rios. Este descubrimento orixinou outras teorias dobre a orixen do carnaval, e situouse nos celtas, xa que era unha cultura moi rica anterior a romanización.
Finalmente diriamos que o carnaval é unha festa celta que penetrou a través do mundo romano no cristianismo e os deuses e cerimonias celtas dariannos a verdadeira explicación do fenómeno.
Comprobouse que os trazos fundamentais do carnaval aparecen en grande multitude de culturas e non necesariamente por influencia europea.
O Carnaval é un conxunto de ceremonias o simbolismos das cales se conxugará para obter o seu fin primordial asegurase a continuidade da vida nunha época cósmica perigosa . O carnaval era temido tanto dende o punto de vista moral como politico.
As festas de carnaval suprimironse por decreto en 1939, debido ó cariz que foran tomando os carnavais no século XIX.
A teoria que defende a orixe do Entroido nas Lupercais, baséase en que durante o mes de febreiro os sacerdotes Lupercos de Roma perseguian as súas mulleres e tamen aos homes baténdolle con peles e membros de animais, rito que se revive na localidade de Xinzo de Limia (Ourense)
Ainda que non se pode determinar con certeza a orixe do Entroido, sabemos que no Renacemento tuvo moita resonancia , pero xa antes no seculo XIII. Alfonso X “O Sabio” alude as celebracions de escarnio nas Igrexas.
Do Entroido fannos referencias San Gregorio, o Pai Mariano” Arcipreste de Hita”, Juan de la Encina, Lebrija, Alvaro de Luna, Frai Bartomé de las Casas, e sábese que o Papa Julio II protexeu de xeito especial estas festas.
Sobre as datas nas que se celebra o Entroido en España podemos afirmar que, ao ser unha festa lunar, non existen datas fixas para a súa celebración
En Galicia será dúas semanas e media septuaxesima , sesaxesima, domingo, luns e martes de Entroido. En Xinzo de Limia (Ourense) dura case un mes e denominaxe: Entroido, Antroido, Introito.
Nas escolas a celebración, convértese nun mundo diferente. A rapazada fai xogos no patio e rememora as costumes tradicionais do Entroido; nas que os cativos cheos de Leticia esquecen os problemas e o traballo cotiá.
Tamen elaboran disfraces e desfilan as comparsas. Ë pois o momento de cambiar de personalidade, facerse distintos, acompañarse das bromas e fantasias, facer cousas que non serian capaces de facer con cara descuberta.
Os barullos, as mascaras e algaradas enchen este acontecemento para dar testemuña da creatividade lúdica dos nenos, da súa comunicación afectiva, convertendose en actores para exteriorizar os elementos internos da súa individualidade.
Xavier Barros Castro
Campolongo 2008
Viaje a las Cies
Las Islas Cíes, situadas en la entrada de la Ría de Vigo, en la provincia de Pontevedra, forman, junto con las Islas de Ons y Sálvora el Parque Nacional de las Islas Atlánticas.
El archipiélago de las Cíes está formado por tres islas y varios islotes más pequeños. El espacio protegido abarca una franja de mar de 100m a partir de la bajamar. Las islas se llaman Isla de Monteagudo o del Norte, Isla del Faro o del Medio e Isla de San Martiño o del Sur. Las dos primeras, muy próximas entre si, están unidas de forma natural por el Arenal de Rodas y artificialmente por un pequeño dique. Entre ambos se encuentra el Lago dos Nenos, de aguas poco profundas que hace las delicias de los más pequeños. La Isla de San Martiño o del Sur está separada de las anteriores por el estrecho Freu da Porta. La vertiente Este de las islas, que da a la Ría de Vigo, es de relieves suaves, con arenales y dunas, en tanto que la vertiente Oeste, que mira hacia el Océano Atlántico, es muy abrupta, rocosa, con acantilados donde el mar rompe con fuerza. Son características de estas islas las cuevas excavadas por el mar, llamadas aquí Furnas.
En las Islas Cíes se han encontrado restos de herramientas de piedra y materiales cerámicos datados en el paleolítico (de 100.000 a 18.000 años a.C.) y el Neolítico (6.000 años a. C. aprox.), si bien es al final de la era del bronce (en torno a 1.200 años
Dicha excursión se llevó a cabo,a propuesta de Don Carlos Abellán Presidente de la Asociación Compostelana Amigos de los Ferrocarriles de Santiago de Compostela
La experiencia fue magnifica. Gracias por contar con nosotras
El archipiélago de las Cíes está formado por tres islas y varios islotes más pequeños. El espacio protegido abarca una franja de mar de 100m a partir de la bajamar. Las islas se llaman Isla de Monteagudo o del Norte, Isla del Faro o del Medio e Isla de San Martiño o del Sur. Las dos primeras, muy próximas entre si, están unidas de forma natural por el Arenal de Rodas y artificialmente por un pequeño dique. Entre ambos se encuentra el Lago dos Nenos, de aguas poco profundas que hace las delicias de los más pequeños. La Isla de San Martiño o del Sur está separada de las anteriores por el estrecho Freu da Porta. La vertiente Este de las islas, que da a la Ría de Vigo, es de relieves suaves, con arenales y dunas, en tanto que la vertiente Oeste, que mira hacia el Océano Atlántico, es muy abrupta, rocosa, con acantilados donde el mar rompe con fuerza. Son características de estas islas las cuevas excavadas por el mar, llamadas aquí Furnas.
En las Islas Cíes se han encontrado restos de herramientas de piedra y materiales cerámicos datados en el paleolítico (de 100.000 a 18.000 años a.C.) y el Neolítico (6.000 años a. C. aprox.), si bien es al final de la era del bronce (en torno a 1.200 años
Dicha excursión se llevó a cabo,a propuesta de Don Carlos Abellán Presidente de la Asociación Compostelana Amigos de los Ferrocarriles de Santiago de Compostela
La experiencia fue magnifica. Gracias por contar con nosotras
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